Ángel Ramón Rivera Zambrano, de 39 años de edad, murió la tarde del jueves 2 de febrero electrocutado en el distrito de Reque cuando limpiaba el techo de su vivienda luego de cinco horas continúas de lluvia. Ese mismo jueves Magdalena Recalde Cajo se desplomó de un paro cardíaco en momentos que realizaba labores similares. Horas más tarde, la madrugada del viernes, al anciano Víctor Augusto Alva le cayó una pared de su vivienda mientras dormía. Tres personas murieron en apenas dos días en Chiclayo, la capital de la región norteña de Lambayeque, donde las lluvias se iniciaron la noche del miércoles y continuaron durante cinco horas. Las precipitaciones se repitieron durante toda la noche del jueves. Algunas casonas del centro histórico de la ciudad, alquiladas para comercios, se vinieron abajo. Son 38 distritos de tres provincias de Lambayeque golpeados por las lluvias incesantes: el 50% de los distritos afectados en todo el país.
El viernes último el gobierno se vio obligado a declarar el estado de emergencia por 60 días en tres regiones del norte de Perú, luego que el presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski llegara a Chiclayo, y viera el desastre –tal vez anunciado- que las lluvias ocasionaban hasta ese momento. Mientras tanto, miembros del equipo ministerial se desplazaban por todo el territorio para observar lo sucedido.
Hasta el viernes 3 de febrero a las 8 y 30 de la noche, un informe con la evaluación preliminar de los daños elaborado por el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), reportó 50 mil 70 personas afectadas en Lambayeque, de las cuales 24 mil 615 eran damnificadas al quedarse sin vivienda en forma permanente o temporal. A nivel de las casas se registraron más de 11 mil afectadas, de las cuales 2 mil 240 colapsaron y otras 2 mil 753 fueron declaradas inhabitables.
El jueves 2, el Comité Multisectorial del Fenómeno El Niño dio una explicación sobre el desastre desatado en un comunicado: se “considera que se han consolidado las condiciones para El Niño costero, débil en el presente verano”; y que “estas condiciones favorecen un aumento en la frecuencia de lluvias de magnitud muy fuerte, especialmente en la costa norte”.
Las autoridades regionales se reunieron y entregaron 72 motobombas a los alcaldes de los diversos distritos, informó el secretario técnico del Comité de Defensa Civil de Lambayeque, Carlos Balarezo Mesones, quien además señaló que hasta el viernes se había distribuido 50 toneladas de ayuda humanitaria.
En Chiclayo, las calles y avenidas se convirtieron en lagunas, a pesar que muchos buzones de desagüe fueron destapados para enfrentar el embalse. Los buzones luego colapsaron. El tránsito se desbordó en algunos sectores de la ciudad.
Aguas fangosas
El ingeniero hidráulico Miguel García Puémape señaló que en términos de “caudal”, el primer día de lluvia, el miércoles 1, cayó sobre la ciudad de Chiclayo: un millón 300 mil litros por minuto. Si se asume que 20 horas después de las lluvias, “se han evaporado e infiltrado en suelos secos la mitad de aquella cantidad, entonces se encuentran sin drenar en toda la ciudad un estimado de 250 mil metros cúbicos de aguas fangosas”, apuntó.
"Tres personas murieron en apenas dos días en Chiclayo, la capital de Lambayeque. Son 38 distritos de esta región golpeados por las lluvias incesantes: el 50% de los distritos afectados en todo el país."
García Puémape reveló que la intensidad de las lluvias supera la del 14 de febrero de 1998, durante el Fenómeno El Niño. Preguntó: “¿Cuánta agua permanecerá enlagunada y por cuanto tiempo, en los 30 kilómetros cuadrados de área urbana techada, pavimentada y la periferia de asentamientos humanos fuera de control?”.
Ruperto Arroyo, periodista, recordó que “después del 98’ nada ha cambiado en Chiclayo. “Seguimos sin drenaje pluvial, cortes de energía eléctrica, pésimo servicio de alcantarillado. Desde esa última experiencia han pasado 19 años, las autoridades pasan y el trabajo planificado es nulo...a este paso es impensable lo que se viene”, remarcó.
A la altura de Mórrope, 30 kilómetros al noroeste de Chiclayo, la Panamericana Norte quedó bloqueada en el kilómetro 835 por grandes lagunas formadas alrededor, producto de las aguas desbordadas del río La Leche y que llegaban hasta la pista. Un ómnibus volcó al tratar de cruzar estas aguas.
Mientras las lluvias no paraban, se conoció que había sido suspendida la inauguración de la obra de defensas ribereñas ejecutadas por el Gobierno Regional de Lambayeque en el río Reque, sector de Ciudad Eten y programada para este sábado 4. La obra, con un presupuesto de 14 millones 208 mil 648 soles, es considerada como la estructura de protección más importante construida en Lambayeque, según informó el alcalde de Ciudad Eten, Germán Puican Zarpán.
De la vigilancia al estado de alerta
El jueves 2, el Comité Multisectorial del Estudio del Fenómeno El Niño, estableció pasar del estado de “vigilancia” al estado de “alerta”, lo cual permitía intensificar el monitoreo de la emergencia. La medida se adoptó ante la evolución reciente de las condiciones océano-atmósfera en el Pacífico Ecuatorial Oriental, que incluye la costa norte del Perú.
El texto del Decreto Supremo Nº 011-2017-PCM, publicado el último viernes, declara en estado de emergencia a las regiones de Piura, Lambayeque y Tumbes, por el peligro y desastres causados durante el actual periodo de lluvias, para la ejecución de acciones y medidas de excepción inmediatas y necesarias de respuesta y rehabilitación.
"La intensidad de las lluvias en Lambayeque supera la del 14 de febrero de 1998, durante el Fenómeno El Niño. “¿Cuánta agua permanecerá enlagunada y por cuanto tiempo en el área urbana y la periferia de asentamientos humanos fuera de control?”, preguntó el ingeniero García Puémape."
En el decreto se indica que las acciones en las zonas afectadas fueron insuficientes para atender la emergencia y por este motivo se dispuso que los ministerios que refrendan estas normas, apoyen las labores que realizan los gobiernos regionales de Tumbes, Piura y Lambayeque, así como los gobiernos locales involucrados, con la coordinación técnica de Indeci.
En la otra tribuna, unos 40 líderes de instituciones sociales, empresariales y colegios profesionales se reunieron la tarde del viernes y formaron una comisión de 11 personas para crear una organización que coordine con las autoridades en todos los niveles. La sede de la comisión será el Colegio de Arquitectos.
La misión principal y urgente de este equipo: evacuar las aguas de las calles de Chiclayo y sus pueblos jóvenes, exigir la emergencia sanitaria de la ciudad, organizar las juntas vecinales, preparar los expedientes técnicos básicos para solicitar los presupuestos, organizar una logística de apoyo y buscar la reposición de la infraestructura como las casas derrumbadas, los colegios y otras edificaciones que se vinieron abajo. El sábado llegó la ministra de Salud a Chicayo, Patricia García Funegra, para establecer un hospital de campaña. La emergencia continúa.
Fotos: Luis Rodríguez Sánchez, Carlos Fernández Lazo, Henrry Vásquez
VER LA INFORMACIÓN COMPLETA EN CONVOCA.PE: