El Santuario del Divino Niño del Milagro en Ciudad Eten, 20 kilómetros al suroeste de Chiclayo, ya cuenta con una reja de fierro y sensores de alarma de seguridad, con el fin de proteger la sagrada imagen del Niño Jesús y sus reliquias y evitar nuevos robos, como el sucedido el 12 de mayo último, en que los ladrones se llevaron 4 coronas de oro y joyas.  

El Santuario del Niño del Milagro está ubicado a pocos metros de la orilla del mar. Allí la imagen del Niño Jesús, que apareciera en la hostia consagrada hace 367 años, permanece durante casi todo el año.

Este miércoles se llevó a cabo la entrega oficial de la reja en el mismo santuario, a cargo de la Familia Ucañay Mogollón representada por José de la Rosa Ucañay. De igual manera se activó la alarma de seguridad con sensores en la puerta de ingreso y también sensores de movimiento, equipos adquiridos por el Comité Multisectorial Ciudad Eten, que preside Karlos Velásquez Puican, quien dio a conocer esta noticia.

El 12 de mayo último los sacrílegos no escatimaron nada. Una de las coronas era la que ceñía la cabeza del pequeño Jesús, de cuya imagen también se llevaron la hostia bañada en oro que portaba en su mano derecha, la indumentaria que vestía con una capa labrada en hilos de oro, además de otras valiosas joyas que colgaban de su cuello.

“Se podría decir que estuvieron a sus anchas, saqueando todas las vitrinas donde se hallaban infinidad de recuerdos de oro y plata que dejan miles de visitantes al Santuario”, se lamentó el párroco del distrito, padre Eleuterio Vásquez Gonzales, al observar cómo algunos objetos de valor religioso, prácticamente inservibles para los visitantes, habían quedado tirados en el suelo, incluyendo centenares de fotografías; en tanto que las alacenas donde se guardaban las reliquias permanecían abiertas, rotas a la fuerza.

No contentos con ello, los facinerosos rompieron también la alcancía ubicada justo frente a la imagen, de donde se llevaron por lo menos 400 soles de dos semanas de recaudación, según se desprende de los 1,400 que los fieles depositan durante todo el mes. Así lo señaló el tesorero del Comité Multisectorial Divino Niño del Milagro”, Alberto Quesquén Neciosup, uno de los primeros en percatarse del robo.

Ante este hecho y durante una misa de desagravio en el Santuario, el párroco de Ciudad Eten, Eleuterio Vásquez, decidió llevar momentáneamente al Niño hasta el templo del lugar. Ahora, el pequeño Jesús ya se encuentra de nuevo en su Santuario, y se espera que cuenta con la protección debida.

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